Prohibido tener sexo a bordo

Esta entrada bien podría haberla publicado en un blog dedicado a la sexualidad y todo su universo, sin embargo, luego de pensarlo largamente, he decidido que será mejor que lo leas aquí, en un blog dedicado al mundo de los viajes y el turismo.

No es una novedad que algunas encuestas determinan que entre las fantasías sexuales más recurrentes se encuentra la de tener sexo a bordo de un avión. Aunque lo que para muchos se queda en el marco de las fantasías eróticas personales, para otros tantos es una realidad consumada. Tal como lo lees: algunas personas mantienen relaciones sexuales justo a unos pasos cerca de tí, mientras tú respondes a la pregunta de la aeromoza: "¿carne o pasta?".

Debemos convenir en que no debe ser sencilla la tarea, pues el tamaño de los toilettes no contribuyen demasiado al confort de las osadas parejas, sin embargo cualquier aeromoza o tripulación podría contarte increíbles anécdotas de situaciones embarazosas vividas a bordo.

Es por eso que desde su publicación en la web, la Airplane Sex Guide ha atraído a miles de visitantes deseosos de "aprender" las intrincadas técnicas que posibiliten llevar a cabo esta fantasía sexual masiva.

Tal vez quieras echar un vistazo a este original manual, te aseguro que descubrirás posiciones y técnicas propias de un contorsionista de circo. Y queda a tu criterio aplicarlas o no. Pero lo que debes recordar es que la legislación internacional de aeronavegación prohíbe expresa y terminantemente estas prácticas durante un vuelo, y quienes se atrevan a desafiar la reglamentación (y fueran descubiertos) podrán ser pasibles de multas o incluso de prisión. Una de las voces más terminantes ha sido la de los administradores de los nuevos Airbus 380 (equipado con 12 tentadoras suites).

¿Será tal vez el sabor de lo prohibido lo que ubica a esta fantasía entre los primeros lugares de preferencia? ¿Estás dispuesto a correr el riesgo?